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domingo, 26 de septiembre de 2010

Aprender a reirme de mí mismo

Pff que complicado me es hacer eso: reirme de mi mismo. Creo que no puedo -muchas veces- quitarme mi personalidad; es complicado tomarme las cosas con liviandad, ¡reirme de mi mismo! ... ver la vida con total naturalidad: todos cometemos fallos. Creo que es un proceso que lleva mucho tiempo y paciencia; hoy en día ya me puedo reir más, aunque me falta mucho por recorer en este largo -pero sencillo- edificio de la felicidad.

En la foto: Mefistófeles, un ser que se suele representar como un ser racional, altamente frío y con un alto nivel de lógica. Me encantó su forma de ver la vida, con toda liviandad en el libro de Fausto.

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