Como un vaso de agua fresca se recibe el contenido de este libro. En él se encuentra y se analiza las dificultades por las que debe pasar un escritor al plasmar sus ideas sobre el papel. No basta con tener las intenciones, las acciones son las que hablan, tampoco basta con pensar en un tema en general y decir 'de eso quiero escribir' sin antes haberlo pasado por el análisis intelectual que lleva escribir.
La historia consiste en que Parménides quiere escribir un libro que contenga todo lo que sabe, que este firmado por él, que hable sobre la naturaleza y que difunda sus ideas a lo largo de las tierras, para ello, contrata a Perinola, un escritor que le ayudara con la técnica de la escritura. Podemos ver a un Parménides entusiasmado en plasmar ideas, de contar todo lo que sabe pero sin asentar en tierra fija sus ideas, se percibe iluso e infantil al pretender hacer un libro con puro 'bla bla bla' y pocas acciones.
 |
| Parménides de Cesar Aira |
Frases:
"Si juegas con tus ideas sin fijarlas, desaparecerán al mezclarse, al superponerse, al superarse."
"Si por él fuera, hubiera puesto manos a la obra ahí mismo y escribir durante toda la noche para tener el libro al amanecer: esa ansiedad, no era el único rasgo infantil con el que él contaba."
"Parménides se limitó a preguntarle si quería un anticipo, a lo que él se negó automáticamente, sin pensarlo. Lo asustaba la mera idea de un compromiso a ciegas. Y además, ¿Anticipo de qué? O mejor dicho ¿De cuánto?"
"Se dio cuenta de que a pesar de la concentración monomaníaca con la que tenía enfocada la mente en el trabajo propuesto por Parménides, no había pensado por ni un minuto en este trabajo como escritura o elaboración intelectual."
"Parménides, encantado con la pregunta, se precipitaba a responder: quería que los asuntos fueran procediendo encadenados, no sueltos ni fragmentarios como lo hacían los estadistas; quería que hubiera una lógica que llevara de un tema a otro, y que las transiciones se hicieran insensiblemente... En fin, sobre eso podía seguir hablando hasta que se le secara la boca, sin dar la más mínima pista sobre los asuntos o temas."
"Quería un libro, un libro firmado por él, un libro suyo, con sus ideas, y hasta ahí llegaba lo que sabía."
"En la situación no había nada de raro, porque todo el mundo creía tener ideas valiosas y personales, y nadie se molestaba en examinarlas o preguntarse siquiera qué ideas eran."
"Escribir un libro implicaba también pensarlo, encontrar su materia, sus temas."
"Como en todo escritor, en él anidaban vagos proyectos, aspiraciones demoradas y sin forma, que proseguían en su pensamiento sucesivas transformaciones y se desvanecían antes de dejar huella escrita: la vida de un escritor era una vida de sueños"
"La respuesta estaba a la vista: no había hecho más que enfilar frases hechas y obviedades, no pendía sobre él la espada de lo definitivo, no debía preocuparse por las criticas, ni siquiera por la suya. Así era fácil escribir."
"Las intenciones no habían sido poéticas ni por un segundo. Pero quizá faltaba aprender eso: que las intenciones no contaban. Quizá escribir era siempre escribir, y la calidad se decidía en otra órbita."
"Contento y colmado de su persona, se cerraba sobre sí mismo, y al mismo tiempo sentía que le faltaba algo y salía a buscarlo en la literatura."
"El dinero servía para facilitar existencia en la sociedad civilizada."
"Quizá el problema de los escritores era que siempre querían hacerlo bien, siempre querían escribir en serio, y podían pasarse la vida sin empezar, tan abrumadora se presentaba la exigencia de su verdad."
"¿Quién puede decir lo que piensa el otro si lo que piensa uno mismo ya es tan difícil?"
No hay comentarios:
Publicar un comentario