La literatura y la escritura son dos actividades complementarias, una no se puede separar de la otra, escritura, bendita y única forma de expresión libre que tenemos los humanos para que perdure, dejas una marca en la historia por el tan sólo hecho de escribir en 'papel'. El problema está cuando existen reglas para hacerlo, cuando se te espera que lo hagas conforme a un formato o estándar.
De esta manera, cuando existen normas para realizar tus escritos, se rompe el placer por realizar esta actividad, cuando alguien te dice "lo debiste haber hecho así y asado, porque de esta manera te estas repitiendo mucho y caes en la ambigüedad", te aleja de tu cometido cuando pretendes satisfacer al exterior y no al interior.
Hoy recuerdo que no debo dejarme guiar por satisfacer a un público o a un 'moderador'; que me podrán dar consejos de qué y cómo escribir, pero que estos quedan anulados cuando no encuentro placer y satisfacción en ese mundo tan complicado de reglas y formas de escritura.
¡Viva la escritura libre!
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